Avui navegant per internet he topat amb aquest 8 principis. Algú de vosaltres és possible que ja els hagi llegit, a mi m’ha agradat perquè em dóna ànims per defensar el que aquesta pàgina intenta: l’arbre és un ésser viu i com a tal se l’ha de treballar i conèixer. Això a la llarga beneficia a tothom.
Es tracta de 8 principis. Crec que són coses a tenir en compte però no cal agafar-los com un manament a complir sempre doncs precisament l’arbre al ser un ser viu no es pot ser massa dogmàtic.
LOS PRINCIPIOS DE LA ARBORICULTURA MODERNA
Traduït per el Doctor Daniel Rivas Torres .Tomado de: Moore, G. M. 2012. “The Principles of Modern Arboriculture: Sound Philosophy, Better Practice”. Arborist News Vol. 21, number 4. International Society of Arboriculture. EUA.
1. No hacer daño. Cualquier intervención arboricultural no debe dañar al árbol. Ninguna
actividad debe contribuir a hacer peor la condición del árbol en el medio – largo – plazo.
2. Los árboles son seres vivos y todas las prácticas de gestión de arboricultura deben estar de
acuerdo con los principios básicos biológicos. Cualquier actividad de poda debe minimizar
el área de una herida abierta y capitalizar mediante los mecanismos naturales del árbol el
cierre y el sellado de heridas.
3. Los árboles son organismos complejos. Sus estructuras de gran tamaño y longevidad son
producto de la biología compleja, eficientes sistemas integradores y eficaces mecanismos
de defensa biológica. Estos mecanismos de defensa contra plagas y enfermedades son los
más fuertes y más eficaces disponibles en la actualidad.
4. Los árboles estresados y envejecidos tienen menor capacidad de defensa y también son
propensos al ataque de plagas y enfermedades y agudos agentes abióticos. Su manejo
requiere mayor cuidado que los árboles jóvenes vigorosos y saludables.
5. Los árboles son estructuras estáticas y dinámicas. Las prácticas de arboricultura deben
reconocer el impacto de las cargas estáticas y dinámicas y las fuerzas que afectan a los
árboles y el papel de la masa de amortiguación dentro del tronco y la copa.
6. “Más vale prevenir que curar”, es la adopción de un modelo médico que sugiere que la
prevención de la deformidad estructural, enfermedades o cavidades es un enfoque de
gestión superior que tratar de solucionar los problemas una vez que se presenten.
7. Se debe seguir un enfoque no intervencionista o mínimo. La intervención en el
crecimiento natural del árbol se hará sólo por necesidad y en condiciones en que se
entienda la biología y la fisiología del organismo, a tal nivel que la intervención tendrá
resultados claros, racional y beneficiosamente predecibles.
8. Todas las intervenciones deben hacerse de tal manera que se minimice la propagación de
plagas y enfermedades.